A partir de abril, los beneficiarios del Programa Familias por la Inclusión Social recibirán un aumento de los montos mensuales que venían percibiendo.
A partir del mes de abril del corriente los beneficiarios del Programa Familias por la Inclusión Social cobrarán su mensualidad con un aumento considerable. El mismo vino por orden del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, vista la situación de crisis que sufre el país. Un gran porcentaje de la población vive en condiciones de vulnerabilidad, por lo que este nuevo monto será de vital importancia.
El Programa Familias, que funciona en el Municipio de San Miguel desde el 1 de agosto de 2008, es un plan de inclusión social para familias que están por debajo de la línea de pobreza, basado en la mejora del ingreso monetario familiar. Pero la característica más importante de éste es la posibilidad para las jefas de hogar de liberarse de las prestaciones laborales que debían cumplir en el Plan Jefas y Jefes, realizando el traspaso de éste plan hacia el Programa Familias. De este modo, la contraprestación deja de ser laboral para convertirse en un compromiso de las jefas de hogar en atender las necesidades educativas y de salud de sus hijos. El programa es compatible con otras pensiones tales como las pensiones por discapacidad o la pensión por más de siete hijos, además pueden tener un trabajo en blanco que, sumado al Familias, no debe superar el sueldo mínimo, vital y móvil de $1.240.
La ayuda económica ofrecida por el Programa Familias por la Inclusión Social consta de un ingreso mensual que varía según la cantidad de menores de 19 años y discapacitados de cualquier edad que tenga a cargo el beneficiario. “Lo relevante del traspaso a este programa es que hay un aumento considerable del ingreso no remunerativo por hijo” argumenta la directora del Programa Familias en San Miguel, Lic. María Rosa Silva. De hecho, es considerable teniendo en cuenta que el año pasado el mínimo a cobrar era $185 y el máximo $305; y para este año el ingreso estima entre un mínimo de $200 para los que tengan a cargo dos menores de edad, $245 por tres menores, $290 por cuatro menores, $365 para cinco y un máximo de $380 para seis o más menores. Este es un ingreso no remunerativo, es decir, no percibe obra social ni jubilación. La condición o, mejor dicho, el compromiso al ingresar al programa es el cumplimiento de las normas educativas y de salud de sus hijos. Es decir, enviar a los hijos a la escuela y la vacunación de los menores según el Plan Nacional de Vacunación. Para esto, deberán presentar cada dos meses certificados de alumno/a regular y certificados de cumplimento del Plan Nacional de Vacunación.
San Miguel cuenta con 2.202 traspasos del Plan Jefes y Jefas al Familias. Según el Ministerio de Desarrollo Social, el distrito tiene un padrón de 6.271 Plan Jefes, de los cuales se estima que hay 1.900 jefes, es decir, familias que no podrían acceder al Programa Familias porque tienen un solo hijo o bien no tienen hijos menores de 19 años. El cálculo que realiza el equipo del Familias de San Miguel es que quedarían por hacer el traspaso de un plan al otro de 2.169 personas, teniendo en cuenta también que este cambio de programa es voluntario.
El impacto económico del programa en San Miguel tiene como dato relevante que en el lapso de octubre de 2008 a febrero de 2009 se ha dado un aumento de $183.594 por mes más que el año anterior, sumando un total de $2.095.475 en estos cinco últimos meses. Este ingreso no remunerativo, teniendo en cuenta que la población objetivo con la que se trabaja está bajo el nivel de pobreza, será consumido en alimentos y vestimentas, principalmente.
Hoy en día continúan los talleres de sensibilización en los barrios. Los mismos están destinados a proporcionar información clave sobre el programa a los referentes barriales y se asesora sobre los trámites y documentación necesaria para efectuar el traspaso. Comentaba María Rosa que “mientras haya traspaso, mientras estemos buscando a estos dos mil y pico de jefes que no se pasaron, nosotros seguiremos haciendo los talleres de sensibilización e información” y agrega que “el objetivo de estos talleres es llevarles información sobre el programa, concientizar a la gente de la necesidad de que se pasen, porque este programa no tiene una contraprestación laboral, sino que requiere un control educativo y de salud por parte de la familia”.
Con vistas a futuro, tres miembros de la familia beneficiada con este programa podrán acceder a becas para realizar cursos de capacitación en diferentes disciplinas. Cada uno de estos miembros podrá cursar hasta dos talleres por año, para los cuales recibirán $60 en concepto de viáticos.
“Estamos trabajando con una población muy vulnerable, el 20% tiene más de cinco hijos, entonces, ese 20% de la población aumentó su ingreso, en comparación con lo que cobraban por cinco chicos en el Plan Jefes que era $150 y ahora con seis o más cobran $380”, comentaba María Rosa Silva, agregando consecutivamente que “me parece que es positivo, si bien el monto es bajo de acuerdo a la crisis que hay, pero mejoraron sensiblemente el ingreso en el hogar”.
Evidentemente, la crisis que atraviesa al país y, por ende, al distrito es un factor duro de subsanar. Pero brindándoles a los sectores más vulnerables al menos una pequeña ayuda para subsistir, capacitarse y buscar alternativas de vida, estamos dando nuevas oportunidades y esperanzas para combatir mano a mano la crisis.
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