miércoles, 4 de marzo de 2009

OPINIÓN- EL DRAMA DE TARTAGAL

Este articulo fue rechazado de publicar en un diario local de San Miguel, 
Si bien como editor de la Revisteca news,  no estoy en un total acuerdo con los dichos del mismo, La Revisteca news lamenta la no publicación y se manifiesta en contra de todo tipo de censura por motivos ideológicos o comerciales.

 A continuación reproducimos el articulo del autor Guillermo Cesar Vadillo.

Daniel Franco

EL DRAMA DE TARTAGAL

 

    Pasados los momentos angustiosos del aluvión que azotó a la ciudad de Tartagal, nace un drama que llega para quedarse. Sus pobladores perdieron todo, no tienen comida ni agua. A cinco días de la catástrofe ni el gobierno nacional ni el provincial anunciaron un plan de salvamento. Solo la falsedad, una vez más de la política, se hizo vigente con las palabras de la ministra del Desarrollo Social, Alicia Kirchner quien expresó “el Estado está presente en Tartagal de todas las formas posibles; y yo voy a volver a Tartagal todas las veces que sea necesario”.

   El ministerio  de Desarrollo Social quedó a cargo de la coordinación de ayuda a las victimas, sin el soporte del Sistema Federal de Emergencias (Sifem), organismo que se encuentra a cargo del Ministro del Interior, Florencio Randazzo.

   Los ciudadanos de Tartagal reclaman obras que resistan otro embate natural. En el año 2006 durante la presidencia de Nestor Kirchner, se produjo en Tartagal una catástrofe similar. Se proyectaron obras de defensa de las que solo se hicieron menos de la mitad, como consecuencia quedó un espesor de revestimiento mínimo; la obra demandó 80 millones de pesos. No acompañaron al proyecto ningún estudio previo para conocer las causas de estos fenómenos.

   Producida la reciente calamidad, una vez más se mostró la falta de un plan de emergencia, quedando al descubierto las fallas del Estado para responder a situaciones límites. Existe un  organigrama en el Sifem que aporta las herramientas para actuar en estas catástrofes, esta red de contención nunca fue empleada, quedó solo en papeles,

   Al producirse el reciente aluvión ninguna cadena de responsabilidades estaba delineada adecuadamente. Funcionarios de cualquier nivel, hicieron públicas declaraciones inexactas sobre la cantidad de daños producidos, damnificados y evacuados. Mostraron ante la opinión pública el  desconocimiento que  tenían de la catástrofe que entristecía a la Nación.

      La gente de la Capital, como de las Provincias concurrieron prontamente a enviar  apoyo a las víctimas con gran entusiasmo, pero no existió  un patrón lógico de asistencia que organizara el envió de los materiales. Nuevamente la falta de ordenación se hizo presente. Los militares y su gigantesca estructura logística no recibieron pedidos de apoyo fundado. Entre tantos males surgieron los cascos blancos que dependen de la Cancillería,  cuentan con especialistas en catástrofes, solo fueron enviados tres a la zona del desastre, un número irrelevante, para un organismo que cuenta con un presupuesto de nueve millones de pesos, la mitad de ese dinero se halla destinada al pago de sueldos.

    Tras el aluvión, se enfrenta ahora el desafió de evitar la propagación de enfermedades infectocontagiosas, en especial el denge, una dolencia que puede causar la muerte. Este mal se agrava con la acumulación de aguas estancadas y el agrupamiento de personas en los centros de evacuados. Se genera de esta forma la posibilidad de aparición de un brote epidémico.    

    Con una actitud escénica la Presidenta recién llegada de su “visita” a España, caminó por las calles de la golpeada ciudad de Tartagal,  prometió la construcción de 500 viviendas como ayuda a quienes perdieron todo por el alud de barro, y se comprometió con el envió de equipos técnicos del Ministerio de Desarrollo Social y de la Secretaria de Obras Públicas para evitar la reiteración de estos desastres, que ocurrieron en 1979, 1984, 1986 y 2006. Sus promesas dejaron fuertes dudas en la población.

    Lo que vio la “Doctora” Cristina Kirchner en su recorrida por la zona del desastre le permitió expresar en su paleolítica izquierda aprovechando la ocasión para realizar un ataque elíptico sobra la gente del campo, “Cuando siento reclamos acerca de tal y cual exención impositiva, hacia sectores que han tenido la suerte de tener grandes rentabilidades, creo que deberían ver otros rincones de la patria” en alusión a lo ocurrido en Tartagal, luego agregó “Lo digo por que lo siento acá (llevándose la mano al pecho). Me hierve la sangre cuando veo tanto egoísmo, tanta avaricia y tanta pobreza al mismo tiempo”. La señora Presidenta parece desconocer que la opinión pública tiene conocimiento de la cuantiosa fortuna que posee el matrimonio gobernante.

       Ante este panorama me pregunto: ¿En qué puede desembocar la actual parálisis política social y moral de la Argentina? ¿Hay un límite natural para la decadencia de una Nación o es necesario reaccionar para evitar el hundimiento definitivo? Creo que una abrumadora mayoría de argentinos se hacen también estas preguntas. El momento exige definiciones políticas estratégicas y la dirigencia con sus actitudes, no da muestras de tomar conciencia, enredados como están en su soberbia y entuertos.

       El desconcierto del gobierno es total; la desesperanza de la sociedad, completa.

                                  

                                                                                                            Guillermo César Vadillo

0 comentarios:

El Pronostico de Hoy

PRESENTACION A ESPACIOS

Presentacion a Espacios
View SlideShare presentation or Upload your own.

PRESENTACION A MEDIOS

Presentacion a Medios
View SlideShare presentation or Upload your own.

-